- Programa de Conaf, que busca la educación a pequeños habitantes de zonas silvoagropecuarias, particularmente en el cómo impedir la proliferación de incendios forestales, tuvo su jornada de cierre en un acto lleno de colorido y alegría.
No siquiera Forestín, el más popular y querido brigadista y guardaparques de todo el territorio nacional quiso perderse la jornada de cierre del programa Forestacuentos, la novedosa iniciativa que la Corporación Nacional Forestal (Conaf) desarrolla a través de sus intervenciones sociales de Educación Ambiental y que en la comuna de Laja en esta ocasión tuvo como invitados estelares a jóvenes estudiantes de la escuela José Abelardo Núñez.
Representaciones artísticas relacionadas con la temática medioambiental, música y mucha alegría desbordaron los niños partícipes de la actividad, felices con la presencia de Forestín.
Osvaldo Silva, asistente técnico de Conaf, indicó que “la idea y el objetivo de esta iniciativa es que desde muy pequeñitos los niños tengan esa conciencia de la prevención. Estamos muy contentos”.
Jorge Lizama, director del establecimiento, resaltó la importancia de que las instituciones se involucren en la labor educativa de sus comunidades.
“Conaf nos entregó los cuentos para trabajar con los niños de pre básica y se desarrolló un trabajo con los docentes (…) Yo defino mi escuela como un bosque nativo, en donde habitan diferentes especies que se quieren, respetan y participan por el desarrollo de la comunidad. Y como somos parte del bosque nativo para nosotros es un placer tener a la Conaf con nosotros”, indicó el docente.
Forestacuentos nació el año 2009, a raíz de la necesidad de Conaf por contar con un método educativo dirigido principalmente a los más pequeños, donde el objetivo principal fuera fomentar la asimilación de nuevos patrones de comportamiento, a través del desarrollo de valores relacionados con la protección de los ecosistemas y la valorización de las áreas silvestres protegidas.
